sábado, mayo 27, 2006

ESTRELLAS

ESTRELLAS

La noche es amable, fresca, luminosa; la Vía Láctea está plena, se ven miles de millones de estrellas; algunas las reconozco, son las mismas que miraba en el fundo con mi mamá; nada sabíamos de constelaciones pero a algunas las llamábamos: Las tres Marías, Las tres Juanas y, a veces, en noches muy oscuras, Las tres Pepas; luego los corderitos, que a veces eran siete y a veces eran seis; Venus azulosa y fría, destellando orgullosa; Marte, rojo y recovequeando, saliendo casi para ponerse; todas las estrellas nos guían a la Cruz del Sur y que felices nos sentimos de tenerla, con que orgullo la mostramos a los que vienen del otro hemisferio.
Hoy me siento encerrada entre las paredes de mi casa, no puedo dormir, salgo y me reencuentro con el firmamento de mi juventud, es hermoso, inmutable; las estrellas están como pocas veces se ven, limpias, titilan al compás de una música cósmica; algo quieren trasmitir, a lo mejor un recuerdo de los que me acompañaron en mi vida, con quienes las miré. La primera, mi mamá y Pablo, luego los amigos de Las Cruces, hoy olvidados, pero con ellos nos tendíamos en la arena, todavía tibia y contemplábamos el cielo en silencio; luego con mis amigas de toda la vida, también en Las Cruces, tratábamos de encontrar las constelaciones, de las que hablaban los libros; jamás acertábamos, éramos una tropa de ignorantes que vivía feliz la vida, como amigas ¡las mejores!.
Miré las estrellas en el fundo, límpidas y brillantes como recién pulidas, todas las noches salíamos a caminar y a mirar el cielo, a veces estaba sola, otras acompañada, parecía que un imán nos atraía.
Si podía soportar el frío de la noche y la altura, el espectáculo mejor que he visto fué en Potrerillos, bien abrigada descubría que las estrellas estaban allí mismo, al alcance de la mano, daban ganas de estirar los brazos y tomar una para iluminar la casa.
Estrellas del hemisferio sur, las más lindas del mundo ¡Como me gustaría quedarme mirándolas hasta sacarles su secreto! ¿Me tienen algo que decir?. Sólo puedo presumir e inventar algo que me haga feliz y me acorte la noche.

4 comentarios:

noghoa dijo...

Hola Bernardita!!
Realmente escribimos parecido como decía Antonio!!
Besos de las constelaciones del Sur,que hoy están ocultas por las nubes de otoño!!
Teresa

noghoa dijo...

Otro mensajito!!
Me he reido mucho con la historia del Sr. Fernández, que magia tiene ésto del cyber espacio, las compañeras de mis hijas se rien cuando alguna dice que estoy en el chat, que bakan es tu vieja!!
Me habría gustado que mi madre hubiera disfrutado de ésta magia,pero está disfrutando de otra más divina!!

Leicca dijo...

Recuerdo las estrellas,
la Cruz del Sur en Año Nuevo...
¿Serían las mismas estrellas que yo vi?

Leicca dijo...

Son hermosas, sí.

A mí me emociona pensar que uno está mirando hacia el Pacífico. El cuerpo se te pone de otra manera.

Es raro, pero es así. El mar es todo agua. El cielo es todo igual.

"Todo igual" no sabemos bien lo que significa. Las mismas estrellas. Los que las miran, que parecen otros, vaya usted a saber si no serán siempre "los mismos". (Porque los demás... ¿no es verdad que nunca las miran?.)