viernes, enero 02, 2009

SENSACIONES

Siento el aterciopelado damasco que destila en mi boca su dulce jugo.
Siento el peso de la aromática breva que se queda en mi mano cuando la toco.
Oigo caer las últimas ciruelas con un sonido apagado, cuajadas de rocío.
Sé que estarán cubiertas de purpurina violeta.
El sol quema la hierba y el campo huele a pasto seco.
Es tanto el calor que ni los pájaros salen a comer, ni los insectos vuelan.
Espero la noche, a que los grillos canten y cuiden mi sueño.
Espero el esplendor de las estrellas veraniegas.
Espero el frescor de la brisa costera.
Espero….espero; deseo….deseo.
Palpo, miro, saboreo, huelo.
El verano me agobia, mata mis ideas, me llena de sensaciones y vivo para ellas.
Espero….espero…..y sigo esperando.