miércoles, marzo 08, 2006

CIBER VIII

Una noche, muchos años atrás, soñé que podía volar; me daba impulso y me elevaba, no mucho, por sobre las casas de un pueblo; abría los brazos y me volvía a un lado, a otro, arriba pasando por un edificio, bajando sobre los autos; volaba y sentía el viento que me tocaba la cara, despeinándome.

Fue un gran sueño.

Otra vez, no hace mucho, pensé que podía volar en una escoba mágica enganchada a un satélite para ir a ver a mis hijos

Fue una volada de luna llena, casi un sueño-despierta.

Hoy se me juntan los sueños y los deseos; las realidades y las loqueras, llena la luna, mis neuronas se alborotan y miro al frente de mi cama; miro y miro, al fin veo y sé lo que me está pasando, ahí está mi ordenador, está apagado (como es lógico) pero todo su potencial está, su maraña de conexiones, su cablerío interior semeja mi cerebro que está listo, a punto, en cuanto haya algo que lo motive ¡salta y empieza a funcionar! ¿Qué será esta vez? ¿Qué se está fraguando en el centro mismo de mi mente?

Además de la semejanza entre axones y cables, entre sinapsis y conexiones, hay una misma energía, mas o menos intensa pero energía, al fin; entre un motivo y un botón no hay mucha diferencia.

Sueños, sueños y locuras; sueños hechos realidad; si junto lo mío con lo suyo puedo volar lejos, viajar, ver y saber de los que quiero, casi sentir, casi tocar; contactar al instante, pensar al unísono, volver a tenerlos tan cerca de mí como cuando los esperaba, decirles tantas cosas que solo de chicos les dije.

Es curioso lo que me pasa, tengo un cierto pudor para expresar mi cariño frente a frente; al escribir a mano es como una proyección de mi misma y siento el mismo pudor, pero.... ante el teclado, el pudor y la edad desaparecen y soy otra, una persona que no teme hablar, que no teme decir cuanto, cuanto los quiero. Pareciera ser que al unir la maraña de neuronas con la maraña de conexiones, sale algo mas puro, mas exacto, mas verdadero.

¡Nos estamos entendiendo mejor!
Julio 9, 2OO3

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me encanta como escribes, por un momento me he sentido como si estuviera leyendo un libro de Garcia Marquez o Isabel Allende. Nunca has pensado en escribir un libro o un cuento? Seguro que gustaba. Tu riqueza de lenguaje es refrescante entre tanta dejadez que hay ahora en los chats y algunas webs personales. Suerte con el sr. Fernandez! todo es cuestion de paciencia... :)

Alicia